TACARIGUA DESCRITO POR EL OBISPO MARIANO MARTI

Día 27 de febrero de 1784, salimos de la casa hazienda de cacao de don Marcos Marrero, jurisdicción o territorio de Mamporal, a las seis y media, llegamos a las siete y media de la misma mañana al pueblo de Tacarigua, distante cerca de legua y media por el camino que pasamos entre haziendas de cacao, que por la arboleda de cacao es penoso. Antes de llegar a Tacarigua, como unas tres quadras, pasamos río de Capaya o de Tacarigua, y a la buelta pasamos por el mismo camino que a la ida por el sitio que llaman San Vicente y por la Casa hazienda de cacao de don Pedro Serrano, en donde visité el Oratorio en el corredor alto de la casa, que es muy baxo de techo de techo y muy reducido, y el Oratorio es baxo la invocación la invocación de Nuestra Señora del Rosario (véase el inventario) y a las once y media el día nos regresamos o llegamos a esta misma casa hazienda de don Marcos Marrero, haviendo visitado la Iglesia parroquial de Tacarigua y el referido Oratorio de don Pedro Serrano, vezino de Caracas, y este Oratorio pertenece a la Parroquia de Mamporal.

      Esta Iglesia es baxo la invocación de Jesús, María y Joseph, sus paredes de bahareque sencillo, cubierta de palma y está algo desaseada y es ms pequeña que la de Mamporal y amenasa ruina, pues está apuntalada con tres puntales a la banda de la Epístola y con dos a la banda del Evangelio. A la banda de la Epístola hay un altar de Animas. El altar mayor consiste en un nicho, en donde están colocadas de esculptura tres imágenes, una de Jesús, otra de la Virgen María y otra de San Joseph, buenas, doradas. La sacristía está detrás del altar mayor; no tiene muchos ornamentos. Véase el inventario. Al entrar a la Iglesia, a la parte de la Epístola, hay Baptisterio. No hay cementerio y he dispuesto se haga. Esta iglesia es pequeña para el vezindario y está ruinosa, pues tres puntales a la banda de la Epístola y dos a la banda del Evangelio, y todos los puntales están a la banda de afuera. No está colocado su Divina Magestad, pues no hay rentas para la lámpara.

      Este cura rural  o Capellán es don Juan Díaz Argote que nació

En la villa de Cura el día 8 de febrero de 1757. Estudió tres años  de Filosofía, de que es Bachiller y tres años de Theología, de que  también es Bachiller, y tiene una oposición a la Cátehdra de Prima de de Theología y tiene catorse actos de oposición a diferentes Curatos. El día 29 de setiembre de1781 se ordenó de Presbytero, a título de este Curato de Tacarigua, a donde llegó el día 17 de noviembre de dicho año 81, y desde entonces está sirviendo a esta Iglesia. No tiene como particular Capellanía alguna. Es hombre, al parecer de muchos, de mucha formalidad, de genio asentado, hábil. Nada se ha sabido contra su buena vida y costumbres, ni he tenido quexa alguna contra él.

A este Cura le pagan los hazendados de cacao doscientos pesos para sínodo y a esta Iglesia cincuenta pesos de oblata para pan, vino y cera, y estos hazendados de cacao, que son diez y ocho, no pagan a este Cura ni a la fábrica de esta Iglesia obvenciones o derechos por sus esclavos. Todos los libres  pagan obvenciones, y si algún libre que no es hazendado de cacao tiene algunos esclavos, paga obvenciones a sus esclavos. Todos los libres pagan primicias, y sólo los esclavos no quieren pagar ni diezmos ni primicias y ahunque alguna vez ha venido despacho de Caracas  para que paguen diezmos, nunca los han pagado.

      Este Cura por falta de Mayordomo propietario es Mayordomo interino o Administrador de la renta de esta Iglesia, que a más de los cinqüenta pesos de oblata, tiene unos años con otros diez y ocho pesos y un real de obvenciones, y de gastos tiene lo mismo que de ingreso, de manera que esta iglesia, después de tomadas las cuentas de  esta visita, no le quedan más que dos pesos y un real. En esta Iglesia sólo está colocado su Divina Magestad el día de Corpus. No se haze monumento.

       Acá no hay vicio ni abuso predominante. Habrá como unas quarenta mujeres que se confiesan entre año, unas unos días en los sábados y otras otros días, principalmente se confiesan en las festividades de Jesuchristo y de María Santíssima.

        Esta parroquia consta de 673 almas. De éstas hay 451 esclavos. Los demás son blancos negros, mulatos, sambos, mestiso y de otras castas  y de los sobrerreferidos la mayor parte son negros. Véase la matricula.

      Este terreno, a más del cacao, produce caña dulce, plátanos, yuca, frixoles, arros, algodón, ñames y cuanto se siembra, y principalmente para cacao son estas tierras muy a propósito y por esto solo el cacao se lleva la atención, y estas tierras de Tacarigua dize este Cura que son mejores y que producen más cacao que las de Mamporal, por ser aquéllas más frescas o no tan cálidas y  ni unas ni otras tienen riego.

El teniente de Governador de este pueblo de Tacarigua, que también lo es del pueblo de Marasma o Capaya, es don francisco Moreno, de Maracaybo, casado en Caracas con doña Teresa Romero. Este dicho teniente Moreno tiene hazienda de cacao en Curiepe, y su mujer vive en Caracas, y habrá poco más de un año que es quando vino el señor Governador  Gonzales, que es Teniente de estos pueblos, y a don Manuel de Assís se le dio el Tenientazgo de Curiepe y de Mamporal, y antes para los quatro pueblos de Capaya, Tacarigua, Mamporal y Curiepe sólo había un Teniente de Governador.

      Esta Iglesia parroquial está fabricada en un sitio en un sitio que

no hay comodidad de las casas, a más que don Laureano Machado, que tiene a distancia de una quadra o dos quadras un repartimiento o casas para habitación de los negros esclavos de su hazienda de cacao no quiere conceder a nadie que fabrique casas inmediata dicha Iglesia por ser suyo aquel terreno; y allí sólo hay Iglesia  y la casa del Cura y una casita donde vive el Cantor o el Sacristán. Por estos motivos y por ser pequeña esta iglesia y amenasar ruina, y que el río de Capaya, de cuya agua se beve, está tres o quatro quadras distante, de no muy buen camino, pues está hondo y el sitio de esta actual Iglesia en alto, a otros le ha parecido y a mí también me lo parece que la Iglesia nueva que se ha de fabricar se coloque en tierras de los herederos de doña Sebastiana Candas, cuyo heredero principal es don Joseph Bencomo, que como son pobres y permiten a varios sujetos libres agregados, cederán unas seis u ochos fanegas de tierra para Iglesia y pueblo y casas de quantos quieran vivir acá; yo he visto el sitio, que está a la misma banda del río en que está ahora la Iglesia vieja, río abaxo, como un quarto de legua, y se puede poner la Iglesia a unas dos quadras distante del río y no más , para comodidad de los vecinos; pero en medio tiene una gran laguna y dudo que el terreno esté libre de inundaciones.

      Me dize este Cura que en los quatro valles de Capaya, de Tacarigua, de Mamporal y de Curiepe se cogerán regularmente, computados los años fecundos con los estériles, unas ocho mil fanegas de cacao. Este territorio de Tacarigua es húmedo y cálido, y por consiguiente, enfermiso, y ahún me parece que es mas enfermiso el terreno de Mamporal. El padre Paulino en esta casa de Marrero ya ha algunos días que tiene calenturas, y en la noche del 28 al 29 de febrero tuve yo frío y calentura, provenida sin duda de mis idas y bueltas a la Iglesia de Tacarigua con soles, que dista de esta casa hazienda de don Marcos Marrero cerca de legua y media.

      Este Curato de Jesús, María y Joseph de Tacarigua, tuvo principio en 20 de julio de 1765, en que se despachó título de primer Cura al Bachiller don Luis Joseph Hernándes, y la partida más antigua de los libros parroquiales es de un bautismo de 1º de noviembre de dicho año de 1765, firmada por dicho Hernándes. Este Curato se desmembró del Curato de Mamporal.

      En estos terrenos de Curiepe, Mamporal, Tacarigua, etc., apenas viven los blancos hazendados en sus haziendas de cacao tienen en ellas sus mayordomos, y de éstos algunos son blancos, otros son negros o mulatos, esclavos de las mismas haziendas y con esto se haze  más sensible a los Curas y a otros hombres formales vivir en estos terrenos.

      Doña Petronila Delgado, mujer casada, es de tal condición que ha tomado a punto no venir a Missa a esta su Iglesia sino una Noche buena, y para burlarse de estos Curas, dize que va a Missa a Capaya o a Curiepe, siendo assí que estas Iglesias y todas son mas distantes de sus casa que ésta de Tacarigua, y la verdad es que ella ni va a Missa ni a Capaya ni a Curiepe, ni en parte alguna. Esta es una muger  muy desbocada y todos la  temen, ahún las justicias. En los años antecedentes tampoco venía acá en la Quaresma para confear y comulgar, y esta misma doña Petronila tiene una hija llamada Leonor, que ha pedido contra don Ignacio Romero palabra de matrimonio y estupro, y este memorial sea decretado. Véanse las notas de don Hilario.

      Los ríos de Paparo, de Capaya, de Cuira, de Caucagua, de Taguasa, el Guayre y algunas quebradas van a parar al Tuy.

      El río de Curiepe por sí solo entre al mar entre Higuerote y el Capaya.               

FUENTE: OBISPO MARIANO MARTI

DOCUMENTOS RELATIVOS A SU VISITA PASTORAL DE LA DIÓCESIS DE CARACAS (1771-1784), TOMO II, LIBRO PERSONAL, BIBLIOTECA DE LA ACADEMIA NACIONAL DE LA HISTORIA, Nº 96, FUENTES PARA LA HISTORIA COLONIAL DE VENEZUELA, CARACAS, 1998, pp. 732

RECOPILACIÓN DE ADRIAN MONASTERIOS. CRONISTA OFICIAL DEL MUNICIPIO BOLIVARIANO DE BRIÓN.